jueves, 18 de febrero de 2010

ESPEJOS VIRTUOSOS

Hace siglos que las mujeres han servido de espejos dotados de la virtud mágica y deliciosa de reflejar la figura del hombre, dos veces agrandada.

Virginia Woolf
Un Cuarto Propio

viernes, 5 de febrero de 2010

¡QUÉ PENA!

"Yo no contesto los mensajes de felicitación". Con esta simple frase me dijiste que entraba a formar parte de tu gran grupo de cualquieras y desconocidos. Desde esta simple frase me contaste tu más absoluta indiferencia. Entonces, después de ofrecerme toda esa información, tuve que decirte que la amistad no la entendía como cantidad sino como calidad, que para mí era nominativa e individualizada, todo lo contrario a tu cómoda pluralidad. También aproveché para invitarte a mi lista de "los que fueron y ya no son", avisándote de que no ocuparías el primer puesto y por supuesto, tampoco el último. A partir de tu simple frase, se fracturó lo poco irreal que podía quedar, y como consecuencia, tú te atreviste a decir, ¡qué pena!. Discúlpame pero no entiendo en qué lugar queda la pena, cuando no hubo momento para el esfuerzo. Pretendías hacer todo desde el sillón de tu casa, aún no te has dado cuenta, que hay determinadas cosas que requieren levantarse pero eso significaría cansarse, y entonces tú, querrías sentarte de nuevo. Lo que no sabes es que cuando algo realmente te importa, el cansancio puede esperar. Esto te resultará realmente lejano, y es por eso que yo te digo, ahora, ¡qué pena!

jueves, 4 de febrero de 2010

HACERME MAYOR

Natalia, creo que puedo esperar un mes para hacerme mayor. Ahí tendré claro, si quiero o no.

CUANDO LA NECESIDAD APRIETA

Paula, con seis meses, me ha mostrado que cuando necesitamos a alguien en un determinado momento, es cuando menos exigentes y más vulnerables nos volvemos. Ella, se aferra a la primera cara que asoma por su cuna para que la saquen de aquella oscuridad ya innecesaria, atribuyendo el don de salvadora a aquella persona, sin pensar y sin ser consciente, hasta que punto puede merecer serlo. El resto, con conciencia y capacidad de pensamiento, igualmente, nos apoyamos en cualquiera (cual escalón), para salir del agujero en el que nos encontramos. Paula, desde su inocencia; el resto, desde la más molesta desesperación.