sábado, 9 de octubre de 2010

CONVERSACIÓN AJENA

En la sala de espera del médico, dos hombres de uno 50 años:
- ¿No me reconoces?
- Pues ahora que lo dices sí, si no me hubieras dicho nada, no me hubiera dado cuenta.
Silencio.
- ¿Y qué tal? ¿trabajas?
- Estoy parado.
- Vaya...
- Llevaba doce años y me echaron.
- A mí me ofrecieron cogerme mis vacaciones tres meses antes y nunca más volví.
- Ya...
- Sí...
Silencio.
- Me toca, venga, hasta otra, me alegro de verte.
- Sí, adios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario